Izquierda Unida de Andalucía defiende otro modelo económico que no se base en la explotación y desigualdad, y que cree empleo y tejido productivo autóctono, y respetuoso medioambientalmente en Andalucía.
Andalucía, tiene una economía dependiente y desarticulada, promovida por las políticas desarrolladas por el PP y por el PSOE. Andalucía tiene una tasa de paro, el 31’23% de su población activa, lo que significa más de un millón de andaluces y andaluzas en el paro, de los que cerca de la mitad no tienen ingresos, y unas 370.000 familias andaluzas están en el umbral de la pobreza.
Para ello, proponemos un Acuerdo Social amplio en Andalucía, al que se puedan sumar organizaciones políticas, sociales y económicas, que tenga dos ejes fundamentales:
1- Pacto contra el desempleo y la pobreza, que de protección y cobertura social a las personas en paro, o con empleos marginales, y con rentas escasas, con riesgos de exclusión social.
2- Pacto para un nuevo modelo de crecimiento económico, que con el motor de la inversión pública, se apoye en la investigación y la educación, y sea respetuoso con el medio ambiente y los derechos laborales y sociales de las clases trabajadoras.
PROPUESTAS BASICAS PARA LA IGUALDAD SOCIAL Y EL DESARROLLO ECONOMICO.
1- Renta básica garantizada a todos los andaluces y andaluzas. Aplicación de los derechos sociales reconocidos en el Estatuto de Autonomía, entre ellos el derecho a la vivienda, al trabajo estable y digno y a la igualdad de sexos y de origen.
2- Posibilitar crédito barato para pequeñas empresas, autónomos y consumo familiar. Para ello creación de una banca pública y social en Andalucía.
3- Apoyo a los sectores productivos estratégicos de Andalucía, industria agroalimentaria, energética, turística. En la construcción, programa masivo de rehabilitación de viviendas, con la incorporación de materiales inteligentes y ecológicos.
4- Impulsar la ordenación del territorio, identificando por comarcas las potencialidades industriales y agrarias y que permita la eficiencia energética y la política medioambiental.
5- Impulsar el desarrollo de la economía social: cooperativas, empresas familiares y autónomos.
6- Cambio en al política fiscal, con aumento de los impuestos a las grandes fortunas, impuestos medioambientales y persecución del fraude fiscal y la economía sumergida.
7- Apoyo público estratégico a la formación, y a la investigación y a nuevas tecnologías y su vinculación con sectores públicos como la sanidad, la educación y la administración.
8- Defender la concepción planificada de la economía, con la participación activa en los presupuestos y la política económica de las organizaciones sociales y sindicales.
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